Técnica de Laparoscopia.
La laparoscopia (LPS) es una técnica que permite la visión de la cavidad abdominopélvica a través del laparoscopio, un instrumento que se introduce por una pequeña incisión y que consta de una fuente de luz transmitida por una fibra óptica, y una cámara que se conecta a un monitor de televisión.
La LPS ginecológica, desde sus primeras aplicaciones como técnica diagnóstica, ha experimentado un importante desarrollo, y actualmente es aplicable prácticamente en todas las intervenciones ginecológicas, enmarcada dentro del concepto de cirugía mínimamente invasiva.
La laparoscopia empezó para el ginecólogo al comienzo de los años 80. En la década anterior, se había utilizado fundamentalmente como técnica diagnóstica de los problemas de la pelvis femenina.
El período de recuperación más corto y las ventajas de tipo estético acapararon el favor de los pacientes. La primera técnica de laparoscopia ginecológica aceptada de forma general fue la ligadura tubarica.
A comienzos de los años 80 se introdujeron nuevas intervenciones quirúrgicas como la cirugía tuboovárica, la miomectomía uterina y la histerectomía. En el decenio siguiente se efectuaron operaciones avanzadas para el prolapso de los órganos pélvicos, la incontinencia urinaria y los cánceres ginecológicos.
Hoy en día la laparoscopia está totalmente integrada en la cirugía pélvica y resulta imprescindible para el ginecólogo que desea avanzar en el campo de la mínima invasión. La laparoscopia es una técnica que debe aprenderse y que exige una serie especial de experticias que implica:
- La coordinación oculomotora en dos planos
- La formación en ambientes virtuales que semejen el cuerpo humano.
Éstos requisitos no necesariamente se pueden trasladar a un cirujano convencional formado antes de la llegada de esta técnica, ya que como profesor me he dado cuenta que la gran mayoría de los cirujanos después de los 45 años tienen dificultades para adoptar esta tecnología que implica una interface virtual a la cual no está acostumbrado. La nueva instrumentación, las dificultades de exposición, la dependencia de la electrocirugía y la retroacción táctil nominal requieren unos conocimientos quirúrgicos diferentes.
Durante los últimos 20 años ha quedado claro que la laparoscopia se puede aplicar perfectamente a las mujeres y en todos los casos. Muchas intervenciones se realizan con menos pérdidas hemáticas, menos complicaciones de la herida y estancias hospitalarias más cortas. Es casi seguro que la próxima generación de cirujanos pélvicos reducirá los tiempos operatorios y la incidencia de lesiones urológicas. Es previsible, asimismo, que las innovaciones técnicas modificarán la ergonomía y ampliarán el circulo de operaciones y la seguridad de las mismas.
Algunas consideraciones con respecto a la cirugía convencional, son las siguientes:
LAPAROSCOPICA | LAPAROTOMIA | |
VENTAJAS | Mínima invasión Magnificación campo Menor dolor Rápida recuperación Mejor estética |
Visión real del campo Visión de profundidad Permite el uso del tacto Menor costo |
DESVENTAJAS | Visión en dos dimensiones Pérdida de profundidad (excepción: Da Vinci) NO permite el uso del tacto Mayor costo Cansancio por posición |
Destreza manual limitada a escala natural Temblor de manos puede afectar la precisión Mayor dolor Recuperación más lenta Cicatrices mayores |
Por todas éstas razones la laparoscopia y la robótica son aspectos de la cirugía de mínima invasión y de ambientes virtuales que vinieron para quedarse.